Se utilizan sales de hierro o de zinc en función del material y de la resistencia a la corrosión final que se requiere. Es un proceso que puede aplicarse por rociado o por inmersión, en función de la geometría de la pieza.
Se utilizan sales de hierro o de zinc en función del material y de la resistencia a la corrosión final que se requiere. Es un proceso que puede aplicarse por rociado o por inmersión, en función de la geometría de la pieza.